¿Por qué Miel sí y Azúcar no?
«La miel alimenta, el azúcar NO»
Este motivo, a pesar de simple, es bueno recordarlo. No es ridículo poner énfasis en lo esencial cuando vivimos en una sociedad que ha generado prioridades que en realidad, ni siquiera debiesen estar en nuestra lista de necesidades.
Recuerdo cuando era niño y acompañaba a mi mamá a hacer las compras del mes, entre su lista no podían faltar los 5 kilos de azúcar. También recuerdo cuando mi primera sobrina no quería tomar su leche, cerca de los 5 meses de vida, y como mi mamá le explicaba a mi cuñada lo necesario que era agregarle azúcar.
El tema no es sólo que el azúcar no alimenta, el problema es que también genera un gran daño. Si solo no alimentara, podría ser un aliado para acompañar los alimentos saludables, por ejemplo, frutas con poco dulzor, para hacerlas más sabrosas para los niños; sin embargo, es literalmente un enemigo de nuestra salud, dando placer, en desmedro de nuestro metabolismo.
El azúcar por ejemplo es un inmunosupresor, esto quiere decir que baja la capacidad de su sistema inmune, para realizar su trabajo, siendo las primeras 2 horas criticas para la función de las células de este sistema (1). Sin embargo, la miel hace todo lo contrario, alimenta, y evidentemente no solo regula positivamente el sistema inmune que nos ha servido de ejemplo, sino que el conjunto de sus nutrientes juegan un rol poderoso en el metabolismo celular que da vida a cada uno de nuestros tejidos.
Una revisión publicado en Journal of Biomedicine and Biotechnology, describe que gracias a que la miel contiene flavonoides, ácidos fenólicos, vitamina C, carotenoides, ácidos orgánicos y aminoácidos posee una fuerte acción antioxidante; la concentración de cada nutriente, varía dependiendo de las plantas a las que las abejas tuvieron acceso (2). Esto es maravilloso, no solo nutre. El que se nos exprese que tiene un efecto antioxidante, también nos indica que nos ayuda a mantenernos sin los daños que provocan la mayoría de los radicales libres y a tener un desarrollo humano hacia edades más avanzadas, con el menor trauma y con la armonía en que realmente fue pensada la vida.
¿Vale la pena cambiar el azúcar por la miel entonces?
Referencias
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Goldman AW, Burmeister Y, Cesnulevicius K, Herbert M, Kane M, Lescheid D, McCaffrey T, Schultz M, Seilheimer B, Smit A, St. Laurent G III and Berman B (2015) Bioregulatory systems medicine: an innovative approach to integrating the science of molecular networks, inflammation, and systems biology with the patient’s autoregulatory capacity? Front. Physiol. 6:225. doi: 10.3389/fphys.2015.00225.
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C. Gonzalez de Vega,C. Speed,B. Wolfarth,J. Gonzalez. Traumeel vs. diclofenac for reducing pain and improving ankle mobility after acute ankle sprain: A multicentre, randomised, blinded, controlled and non-inferiority trial. Int J ClinPract, October 2013, 67, 10, 979–989. doi: 10.1111/ijcp.12219.